EL VOTO DE SERGIO LEAVY ES NECESARIO PARA EL PROYECTO IVE “QUE SEA LEY”
EDITORIAL
Apoyamos al senador nacional SERGIO LEAVY para que considere la necesidad imperiosa de dotar a las mujeres del país, de una normativa que permita erradicar el aborto clandestino, la criminalización de las mujeres víctimas de la violencia obstétrica y una justicia absurdamente retrógrada que obliga a maternar a niñas víctimas de abuso sexual infantil.
Apelamos desde este medio, a la sensibilidad del legislador perteneciente al Partido de la Victoria en Salta y en tal caso, le pedimos que repase con la memoria, los casos que afectan a las infancias de las comunidades originarias, violentadas y re victimizadas por operadores de Justicia, cuyo único compromiso ante estos casos fue con el fanatismo religioso.
https://www.unicef.org/argentina/comunicados-prensa/puedodecidir2020
Entendemos que los valores primordiales de una ética natural, una de las bases de la ética teológica, es la persona humana, su libre albedrío, su cuidado integral y la solidaridad que todo Estado y gobierno, deben procurar para que esto se cumpla.
La “conciencia” inobjetable debe tener en cuenta la realidad como verdad irrefutable y ésta, en ARGENTINA, marca que las mujeres vulnerables en los estratos económicos castigados por los últimos años del neoliberalismo salvaje; son las víctimas del ABORTO CLANDESTINO que representa un negocio delictivo que reporta grandes ganancias monetarias a no pocos supuestos objetores de esa conciencia amañada a los intereses oscuros que perjudican irreparablemente a las mujeres en el país.
Comprendemos que la campaña difamatoria, patotera y muy lejos de las premisas del cristianismo en contra del senador nacional, pueden influir en la INDEPENDENCIA DE LA ACCIÓN POLÍTICA que le cabe a toda persona en función de una banca legislativa en cualquiera de los estamentos institucionales de la REPÚBLICA. No obstante, es mucho peor la consecuencia de UNA MUERTE POR ABORTO CLANDESTINO que el ENOJO DE LOS FANÁTICOS RELIGIOSOS.
Ésa desvirtuación de la vida espiritual, debe darle la certeza al LEGISLADOR que los grupos cuyos intereses son más materiales que álmicos, DESLEGITIMAN TODO DOGMA y por tanto que tenga en sí mismo, la TRANQUILIDAD DE UNA CONCIENCIA COLECTIVA A FAVOR DE TERMINAR CON EL MALTRATO HACIA LAS MUJERES.